Haciéndole el amor a México: De Avándaro a Pilcaya
Una crónica visual de viaje por Avándaro, Valle de Bravo, Tonatico y Pilcaya con una parada muy especial por el centro de retiro espiritual Maranathá. Iniciamos así una serie en la que pretendemos compartirle la experiencia de viaje al que no puede hacerlo, y motivar al que sí puede para vivir por sí mismo la experiencia. En nuestro caso en particular, Valle de Bravo parecía un destino inaccesible hace años, pero ahora, Pueblo con Encanto, hay posadas y hoteles para gente con diversos niveles de presupuesto. Sólo agregaríamos un detalle, por nada del mundo se pierda en Valle de Bravo el agua de zarzamora o las paletas de arrayán. Son sabores privilegiados e irrepetibles en el mundo.
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